DESDE LA IZQUIERDA: APOYAMOS LA HUELGA GENERAL

Sí, la situación económica es extremadamente preocupante, no menos lo es la política.

Estamos asistiendo a un denigrante espectáculo en el que todo vale con tal de desprestigiar al adversario y arañar unos votos por aquí y otros por allí. El PP, genuino representante de la derecha española mas rancia,  día a día nos da ejemplo de lo que ellos entienden  por “patriotismo”.

Eso del bien general, de buscar soluciones de manera conjunta, de dialogar, etc, no significa nada para ellos, lo único importante es seguir manteniendo sus privilegios económicos y ganar las próximas elecciones generales como sea, aunque su “querida” España se hunda y se desangre poco a poco. Frente a los numerosos casos de corrupción protagonizados por destacados miembros del PP, estos lanzan  gravísimas acusaciones, poniendo en duda el papel de los  jueces, fiscales, policía, prensa, en definitiva, de todos los que han sacado a la luz pública las tramas corruptas vinculadas al partido de la oposición.

Si todo sigue como hasta ahora, mucho nos tememos que el PP ganará las elecciones generales, pero lo hará sobre un país llenos de millones de parados, de un número de pobres desconocido hasta la fecha en España, de hogares medio arruinados y de la desconfianza de los ciudadanos que no aceptan eso de que “todo vale” para llegar al poder. El PP continuará con las medidas de ajuste y las reformas, y bajo la excusa de la “herencia heredada” del PSOE, tendrá manga ancha para hacer todo lo que le manden los mercados, las grandes multinacionales, la patronal y las corporaciones bancarias. La perspectiva del PP gobernando da miedo, mucho miedo.

La crisis económica que nos está ahogando ha provocado una tasa de paro superior al 20%, y no deja de crecer. Las deudas familiares, las hipotecas, la incertidumbre laboral y el sombrío futuro que se imagina en el horizonte crean un clima social  insostenible. Si bien el PSOE no es el culpable de la crisis, que es mundial, producto de la voracidad, el egoísmo y las contradicciones del sistema capitalista, sí es culpable de la forma en que está intentando resolverla. Transmite la imagen de que gobierna a impulsos momentáneos, no está seguro de nada de lo que hace, y lo que vale para hoy, mañana ya no sirve. El desprestigio de Zapatero crece por momentos, y ya sus palabras no convencen a casi nadie, a pesar de la tranquilidad que parece transmitir en sus mensajes públicos y sus formas educadas, tan radicalmente alejadas de la prepotencia y la arrogancia del sr. Aznar.

Pero no basta con esto. Zapatero, que diagnosticó el origen de la crisis, sigue el dictado de quienes la han provocado –recordemos de nuevo, que esta es mundial, no solo española- el FMI, el Banco Mundial, las sociedades de inversión…. a costa de quienes la están sufriendo directamente.  Algo previsible, pues  los partidos socialdemócratas siempre van remolque del capitalismo, son la cara “amable”  del sistema. Está en juego nada mas y nada menos que seguir disfrutando del Estado del Bienestar, y de no perder las conquistas sociales que la clase obrera ha arrancado durante 150 años de lucha heroica y sacrificada. Si no reaccionamos, si no ofrecemos alternativas y luchamos por hacerlas realidad, nos quitaran muchos de nuestros derechos políticos y sociales y nuestras condiciones de vida retrocederán veinte o treinta años atrás, pues entre otras medidas que se barajan, está la de abaratar el despido, lo que en la práctica equivales a instaurar el despido libre. Según las estadísticas mas recientes  tenemos en España 4 millones largos de personas en paro y 8 viviendo en la pobreza.

Por todo esto, y por nuestro futuro, tenemos que apoyar la HUELGA GENERAL, que manifieste nuestro NO mas rotundo a esta situación que nosotros no hemos provocado, y quienes lo han hecho, ahora quieren darnos lecciones de cómo salir de ella. Una vez que se han llenado los bolsillos de nuevo, buscan otras formas para seguir explotándonos, exprimiéndonos.

Hay que hacer de los actuales sindicatos mayoritarios organismos de lucha y coordinación obrera, que no sean solamente representantes formales de los trabajadores, dotarles de un profundo espíritu combativo, con capacidad para hacer frente a la patronal y al gobierno de turno, si sus intereses no coinciden  con los de los trabajadores, cosa que suele ocurrir casi siempre.

Los motivos para apoyar la Huelga General son incontestables.

Apoyamos la HUELGA GENERAL contra el recorte de los salarios y las pensiones y el abaratamiento del despido.

Apoyamos la HUELGA GENERAL contra el recorte de las prestaciones sociales.

Apoyamos la HUELGA GENERAL contra los privilegios de los políticos.

Apoyamos la HUELGA GENERAL contra los recortes en Educación y Sanidad.

Apoyamos la HUELGA GENERAL para terminar con la usura de la banca y frenar los desahucios de miles de familias endeudadas.

Apoyamos la HUELGA GENERAL para protestar contra el bipartidismo, contra esta forma de hacer política injusta, excluyente y discriminatoria.

Apoyamos la HUELGA GENERAL porque queremos una profunda regeneración ética de la política a todos los niveles.

Apoyamos la HUELGA GENERAL para construir otro mundo posible, en el que los únicos privilegiados sean quienes viven de su trabajo sin explotar a los demás, en el que la justicia, la libertad y la solidaridad sean los protagonistas, y no los bancos, las multinacionales, los mercados y los especuladores.

Por todo esto, junto a todos aquellos que comparten estos motivos, ( partidos políticos, sindicatos, asociaciones de vecinos, organizaciones solidarias con los parados y excluidos del mercado laboral, ongs o  grupos  alternativos a la globalización neoliberal) , hay que prepararse para apoyar la HUELGA GENERAL. Ni el PSOE ni el PP van a solucionarnos nada. Son las dos caras de la misma moneda, acérrimos defensores –en mayor o menor medida- de las políticas neoliberales  responsables directas de la crisis.

Solo la lucha unitaria y solidaria de las mayorías populares, desde la base, democrática y autogestionaria, poniendo el eje en una alternativa inequívocamente anticapitalista y socialista, nos señalará el camino para salir de una crisis como la actual y que no vuelva a producirse nunca más.  Los culpables de la misma tienen que rendir  cuentas  ante la Justicia, y públicamente, por lo que han hecho, por tanto dolor y desesperación cómo están creando día tras día.

IZCA.